Villa La Angostura, Neuquén, Argentina.

SALIMOS?

HOY: Villa La Angostura

Arribar al Aeropuerto de San Carlos de Bariloche, ya nos da una amplia sensación de lo que nos espera, me refiero al clima, al paisaje, la vegetación y hasta el espíritu de la gente. Los 82 km que nos separan de Villa La Angostura, nos van entusiasmando a llegar lo antes posible al lugar.
“Noviembre”, ese fue el mes elegido para la visita a la Villa, un mes para algunos ideal para otros no tanto, pero lo que cuenta es, que mas allá de la época que elijamos viajar, Villa La Angostura, tiene posibilidades todo el año, dicho por gente de la zona. Parece que en invierno, van los “conocedores” , contado esto por gente del lugar, a esquiar, y con esos mismos conocimientos tratan de esquiar en el pico del Cerro Bayo, que lo logran solo los muy experimentados, ya que al resto no los dejan asomar ni la nariz, y no conforme con esto también tratan de hacer una escalada al estilo San Martín cuando cruzó los Andes, hasta hace poco, ya que me enteré ,no hace mucho tiempo, que no solo no lo cruzó escalando ni a caballo sino en camilla, que no se que es peor, porque yendo al lugar en cuestión no se puede creer la proeza de esa gente en la cordillera y sin nada de lo que hoy la gente no podría prescindir como los lentes para nieve, la ropa térmica, las botas 100 % impermeables, que se exhiben sumergidas dentro de unas especies de peceras en la vidrieras de los negocios del rubro como para comprobarlo.
Villa La Angostura es uno de esos lugares de ensueño, típica aldea de montaña, con todo lo necesario para pasar unos días inolvidables.
Cada mañana podemos levantarnos y partir para un lugar distinto todos los días, que parecen cortos y no lo son tanto en primavera y verano ya que oscurece cerca de las 21/22 hs, y a eso íbamos a recorrer y conocer todo. Uno de los paseos más bellos a la hora de emprender la marcha es el Camino de los 7 Lagos. Es necesario arrancar temprano porque si bien no son muchos kilómetros, la mayoría de ellos son de ripio y muy lento, sin contar que a cada rato al encontrarnos con un paisaje mas bello que el anterior, nos detenemos a sacar fotos, contemplar, tocar y hasta tomar agua de esos arroyos, la mas cristalina que podamos encontrar y es tentadora. Cada lago es un paisaje increíble. Al llegar a la bifurcación a Villa Traful, nos desviamos unos kilómetros del camino para conocer el Lago Traful, donde están a full los pescadores, con todo el equipamiento para la pesca con mosca y siguiendo unos kilómetros mas bordeando el lago se encuentra la Villa, diminuta, pero muy pintoresca, y así seguimos viaje, parando ante los distintos lagos hasta llegar a San Martín de los Andes, ciudad enclavada en un hermoso valle.
Entre otras excursiones, está el cruce a Chile, desde la villa hay un paso cercano, Cardenal Samoré, con un muy buen paisaje y donde nos sorprendió, a esa altura, gran cantidad de nieve en el camino, con un buen día de sol y unos 25 grados de temperatura, muy agradable.
Podemos hacer el ascenso al Cerro Bayo, aunque no ya para esquiar sino para contemplar la vista de todo el valle, conocer Puerto Manzano, Mirador Belvedere, Cascada incayal, coihue El Abuelo, Bosque de Arrayanes y mas.
Villa la Angostura es un lugar increíble, con alojamientos de primera categoría, con restaurantes, hosterías y lugares gourmet cuidados y excelente cocina. Paseos, pesca, ski, deportes de aventura, buen clima, días interminables, alojamientos exclusivos, excelente gastronomía, más, un abuso.

Alojamiento:"Cabaña La Estancia", ubicada sobre la ruta a pocos minutos del centro, no posee costa de lago, cuenta con un amplio parque, con un pequeño y pintoresco lago artificial. Las cabañas están bien distribuidas, bien decoradas, cuidadas, amplias, muy cómodas,calefacción central, baño con jacuzzi, el desayuno no es esmerado pero correcto, buen servicio, tiene pileta climatizada in/out ( confirmar en la fecha requerida que estén en funcionamiento). Cuenta con servicio de traslados y "rent a car" con buen cumplimiento.
De 1 a 10: 8,50.

Restaurantes:"Placido", bien atendido, exquisita gastronomía, pocos postres pero buenos. Falta un poco de ventilación.
"El Faro", la hostería El Faro, bellísima, a propósito, posee un restaurante de muy pocos cubiertos, con una vista increíble al lago. Excelente lugar, excelente decoración, ambiente perfecto, servicio de recepción y mesa muy buenos. Floja la comida y detalles mínimos pero imperdonables para un lugar de esa categoría.